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Pasaron millones y millones de años para que la especie humana exista sobre la Tierra y cuando esta finalmente apareció, se adapto a ella hasta tal punto en el de vivir de lo que esta les brindaba, no obstante los humanos de esa época solo tomaban de ella lo necesario. Eso marcaba un equilibrio, el hombre trabajaba la tierra con sus propias manos y eso era todo. Pero llego el día en que lo humanos requerían llevar objetos pesados y recorrer grandes distancias así que recurrieron a los animales como ayuda para dichos oficios.
Mucho después el Hombre descubrió una sustancia viscosa e inflamable la cual podía producir aun más energía y calor que la madera y el carbón, dicha sustancia se llamo y aun se la conoce como “petróleo”. Este petróleo llevo al hombre a construir maquinas para poder extraerlo con mayor facilidad y así de esta manera llego la revolución industrial, ahora todo en el planeta se movía con mayor rapidez.
Dejamos de vivir en pequeñas casas y comunidades para pasar a vivir en inmensos edificios y en grandes ciudades, dejamos de cosechar nuestros propios alimentos para poder adquirirlos en locales comerciales a cambio de algo que nosotros mismo fabricamos llamado “dinero”, y así dejamos muchas cosas atrás, claro que esto no está mal, esto es parte de la evolución del hombre en ponerse retos y superarlos por sí mismo, el problema esta cuando estos avances no llegan a todos los habitantes del planeta y cuando este avance trae consigo grandes problemas como la contaminación ambiental, ahí radica el problema. Somos capaces de fabricar muchas maquinas para facilitarnos la vida, pero aun no somos capaces de que estas maravillas sean compartidas con el mundo entero, muchas veces se da por nuestro egoísmo pero otras veces se da que es muy difícil llevar tecnología a lugares los cuales jamás la han tenido.